Hace 55 años, la Revolución Fusiladora de Aramburu y Rojas cerraba definitivamente toda posibilidad de participación popular en la política nacional. El Partido Peronista, además de todos sus símbolos, y de todo aquello relacionado con el Peronismo (literatura, música, imágenes, discursos, doctrina), incluso la mera mención de los nombres de sus máximas figuras (Perón y Evita), quedaba totalmente prohibido. De esta manera se radicalizaba e institucionalizaba la lucha de la oligarquía contra los valores y conquistas populares de la década de 1945 - 1955, con el apoyo del imperialismo, de las corporaciones financieras, terratenientes y empresariales, y, “curiosamente”, también de sectores de la política local que se arrogaban la defensa de las “libertades” ante la “tiranía” que representaba el gobierno peronista.
Radicales, socialistas y conservadores no dudaron en sumarse a las embajadas y al gabinete de esa “revolución” que había asesinado a más de 300 argentinos en la Plaza de Mayo meses atrás. Con estos antecedentes históricos, no debería resultarnos extraño el descaro de los radicales, socialistas y conservadores-Pro de hoy, mediocres discípulos de aquellos primeros “gorilas”, que chillan en la mesa de Mirtha Legrand o en el pasquín del monopolio reclamando “respeto a las instituciones” y al “republicanismo” y “libertad de expresión” y se atreven a calificar al gobierno nacional y popular de “dictadura”, formando parte de un solo partido: el de los enemigos del Pueblo argentino, la “Unión Democrática” versión 2011.
Matias Sánchez. JP Evita La Matanza.
y en tonces que fue la proincripcion peronista ?
ResponderEliminarEl peronismo se basa en un lider, tal cual como el kirchnerismo, se basa en Personas y no en ideas. Todos estos años buscaron enemigos de todos los colores y fue la forma de argumentar sus malos actos (es de cobarde echarle la culpa al otro por errores propios)
ResponderEliminarEs muy grande el dolor que siente el pueblo argentino hoy con esta division. Ojala pronto reine la paz y la union.
Abrazo respetuoso