Ni olvido ni perdón, juicio y castigo. No olvidamos No reconciliamos, son las palabras más acertadas para comenzar este texto a horas del 35° aniversario del golpe cívico militar que regó con la sangre de 30.000 compañeros detenidos desaparecidos nuestra Patria en pos de una obscena entrega al neoliberalismo por parte de grupos económicos (cívico) y vulgares asesinos disfrazados de sub oficiales y oficiales de las tres fuerzas armadas y de seguridad (militar).
Así los mismos que, desde su escaso talento editorial (llámese diario “Clarín” y su suplemento oligárquico de compra opcional llamado “La Nación”) titulaban “Nuevo Gobierno” desde lo que se convertía en el vocero de prensa e iniciaba la transformación de un simple pasquín a un monstruo multi mediático cuya voracidad y codicia combinada con la brutalidad editorial lo han convertido en un grupo que día a día, la historia y las pruebas lo llevan a la vergüenza absoluta y a un punto de no retorno; un claro ejemplo es el pedido de toma de muestras de material genético (saliva, pelos y / o una muestra de sangre) de los herederos (Marcela Noble y Felipe Noble) de la “señora” que comanda el Grupo (de tareas) Clarín S.A.
Este pedido de hoy tiene su origen en el apogeo de la dictadura cívico militar en coincidencia a otro sector cívico que hace dos años, el mal llamado “campo” que mediante la interrupción de la libre circulación en rutas provinciales y nacionales, y el desabastecimiento de alimentos, reclamaban y ostentaban con burdos argumentos y gran apoyo de los grupos monopólicos de comunicación, que la renta extraordinaria de la exportación de monocultivo (llámese soja transgénica) no debía pagar un canon.
Sumado a sub oficiales y oficiales de las tres fuerzas armadas más la fuerzas de seguridad, sometidos a la entrega neoliberal de la Patria, que olvidaron valores y obligaciones transformándolas en violaciones, torturas, asesinatos y arrojar cuerpos al mar desde una superioridad numérica que desde el primer detenido desaparecido pusieron en evidencia la cobardía, inmoralidad y brutalidad combinadas, produciendo hechos impensados y aberrantes, como es la apropiación de hijos de aquellas compañeras detenidas.
Este cóctel cívico militar, poder económico y militar, tiñó de rojo sangre a la Patria, con antecedentes casi idénticos, que los Peronistas, supimos padecer en el bombardeo a Plaza de Mayo en 1955 y la Revolución Fusiladora meses después, y desde el 25 de mayo de 2003, sin poder militar, y con un voraz poder económico, día a día, han tratado de erradicar con otras prácticas.
Estas prácticas, en estos días, a raíz del escaso talento de quienes las llevan adelante se han convertido en predecibles y burdas, y ya no cuentan con el silencio impuesto en base al plomo por gran parte de quienes vivimos en la Patria.
Sabemos, y asumimos, que cuentan con el poder económico y buena parte de los medios de des comunicación, y una pequeña parte de la población que gracias a odio de clases heredado y una buena parte de tilinguería, desprecian este modelo que les arrojo desde el Infierno de las consecuencias del 2001 a la superficie donde disfrutan las medidas acertadas, anti cíclicas y superadoras de los Gobiernos de Néstor Kirchner, quién fue el gran impulsor de políticas en Derechos Humanos, y hoy de la compañera Cristina Fernández de Kirchner.
A 35 años del golpe cívico militar, este 24, todos a la Plaza porque “No olvidamos No reconciliamos”.
Mauro Palazzo. JP Evita La Matanza.
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