A noventa y tres años
del nacimiento de la compañera Evita, las palabras son complejas de
trasladarlas a un texto.
Igualmente voy a
intentar escribir algunas líneas sobre Evita.
¿Que es Evita? Es un
hito en la vida de los que vivieron el 17 de octubre de 1945 y los que
posteriormente fueron los descamisados o sea el pueblo peronista, para ser la posterior
resistencia peronista, para los que la larga noche del proceso de
reorganización devastó, para los que sobrevivieron a los años noventa y sus
ajustes salvajes y también es Evita para los que volvimos en el 2003 junto a
Néstor y Cristina.
Y estas simples
palabras para un militante de la Juventud Peronista Evita hoy 7 de mayo, es un
acto de lealtad, simplemente de lealtad, con lo que significa lealtad en estos
días de sintonía fina, donde los alcahuetes están a la orden del día y la
fuerza brutal de la antipatria sigue desplegando su odio de clases como en los
días del primer peronismo.
Sé que desde esté
nuestra Evita montonera, junto al General, el tío Cámpora y Néstor, estará
feliz y exigiendo el ¡Vamos por todo! Que el camino es unidos y organizados y
que el amor vence al odio, porque no nos han vencido.
Con el objetivo de llevar
a la práctica una de las grandes frases de Evita y lo dicho en las anteriores
líneas, me refiero a “Nuestra patria
dejará de ser colonia, o la bandera flameará sobre sus ruinas”, honrar su
memoria que mejor que ir por la nacionalización de nuestros ferrocarriles, ya
teniendo en nuestras manos el 51% de las acciones de Repsol, porque el 54.11 %
de los votos de la compañera Cristina lo avalan.
Nuestra tarea en un
barrio, en un sindicato o en un colegio secundario o universidad, sigue siendo
dejar girones de nuestras vidas y llevar a Evita como bandera a la victoria y
así la victoria será nuestra.
Finalizando este
desordenado texto hijo de los sentimientos, no olvidamos ni perdonamos, si
hablamos de Evita, a los que gozaron cuando pasó a la inmortalidad, ni los
golpes, torturas y los compañeros asesinados por los fusilamientos del genocida
Aramburu y los bestiales Videla, Viola, Masera, Camps entre otros genocidas que
hoy gracias a la firme decisión política están encarcelados o siendo juzgados.
Tarde o temprano, cueste
lo que cueste, caiga quien caiga, hoy más que nunca, reviente quien reviente
Cristina presidenta porque en la nueva Argentina ya no hay lugar para colonialismo
económico para la injustica social ni para los traficantes de nuestra soberanía
y de nuestro porvenir.
Mauro Palazzo.
Prensa. JP Evita La Matanza.
0 comentarios:
Publicar un comentario