domingo, 27 de junio de 2010

0 ARGENTINA 3 - MÉXICO 1.

ARGENTINA 3 - MÉXICO 1. NO LOS SALVÓ NI EL CHAPULÍN. Pegó en el momento justo, supo capitalizar la fortuna y los errores de su rival, y contó con ese genio llamado Tévez: Argentina venció a México y ya espera la revancha con Alemania. Quizás el partido más sufrido del equipo de Diego en el mundial, comenzó con México tomando la iniciativa y Argentina intentando hacer pie en el mediocampo. Los arranques de Guardado y los remates de Salcido preocupaban a nuestra selección, hasta que en una veloz jugada entre Messi y Tévez se abrió el marcador, con Carlitos anotando, claramente en off side. Y aunque mañana Clarín, Perfil y compañía titulen “Juez de línea K sobornado por De Vido favorece los intereses del gobierno nacional y a la sociedad Kirchner-Maradona”, el árbitro italiano, luego de dudar y mantenernos en vilo por unos momentos, convalidó el gol y Argentina se encontró con un regalito inesperado que supo aprovechar... Pero no fue el único, porque a los pocos minutos Osorio la regaló en su área y apareció Higuaín afirmando poseer la cualidad que todo goleador debe tener: estar en el momento y el lugar justo. Aprovechó la pifia del mexicano, encaró hacia el arco, eludió con calidad al arquero y culminó empujando de zurda al fondo de la red el segundo gol argentino. Ya en el segundo tiempo, para demostrar que si Argentina llegó hasta aquí no fue precisamente por ayudas arbitrales ni errores ajenos, sino por la capacidad de sus jugadores (y de su entrenador para elegirlos) apareció otra vez una de las figuras del Mundial, Carlitos, el Jugador del Pueblo, que desde afuera del área le rompió el arco a Pérez y sentenció el partido, coronando una actuación inolvidable. Sin embargo, cuando todos ya deseábamos e imaginábamos el tan ansiado gol de Messi, el panorama cambió negativamente para Argentina. México, como era de esperarse, reforzó su delantera y arriesgó lo que le quedaba en pos del descuento; sin embargo, en vez de aprovechar los espacios, Argentina se fue metiendo cada vez más atrás, perdió el control de la pelota en el medio y sus delanteros (Higuaín y Messi, ahora adelantado tras el ingreso de Verón) quedaron aislados. El descuento de Hernández aumentó el suspenso y a preocupación. Argentina regaló y sufrió prácticamente todo el segundo tiempo. Afortunadamente, México no logró acercarse en el resultado e incluso Messi pudo marcar el cuarto en una jugada excepcional al final del partido. Seguramente el cuerpo técnico de la Selección tendrá muchas cosas para corregir, sobre todo teniendo en cuenta la importancia de la selección a la que nos vamos a enfrentar, esta Alemania que hoy le clavó cuatro a los pobres piratas. Argentina se sacó de encima un rival incómodo, aprovechando sus oportunidades y luciendo sus individualidades (hoy le tocó a Tévez) y se metió entre las mejores ocho selecciones del mundo. El próximo paso es ante un rival de gran jerarquía y presente, pero ya quedó visto que, aún cuando no funciona del todo bien el equipo, aparecen las individualidades, y en última instancia, algo de suerte... (¿La suerte del Campeón?)
Matías Sánchez. JP Evita La Matanza.


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